Ponencia presentada ante el IV Congreso Internacional, Cultura y Desarrollo, 6 al 9 de junio 2005, La Habana.
Hendrik Vaneeckhaute
Hablar de la importancia de la identidad para el ser humano, es hablar de la dignidad de las personas, de los pueblos, de la vida. La identidad nos dice quién somos, de dónde venimos y nos permite proyectar un camino para el futuro.
“La identidad nos ayuda a mantener la seguridad emocional y la capacidad de acción, mediante la toma de conciencia de las situaciones que vive la persona, la vivencia de ser uno mismo y el sentimiento de pertenencia a un grupo o comunidad.” (Beristain, 1999 [1])